Window Farms, huertos en ventanas
Interesante artículo de Elisenda Pallàs sobre las Window Farms
¿Cómo cultivar tus propios alimentos en un pequeño departamentos sin terraza en una gran ciudad?
Tus propios alimentos frescos todo el año
El reto era grande pero no por ello Britta Riley, diseñadora de Nueva Cork, se echó atrás.
Por un lado quería contribuir a minimizar la huella de carbono que generaba con los alimentos que consumía; por otro lado y consciente de las limitaciones técnicas y distintas realidades locales, sabía que solamente con su experiencia y conocimientos el proyecto difícilmente sería universal.
Poco espacio y ningunas ganas de generar más suciedad. La agricultura hidropónica
le dio la idea: construir un huerto colgante en su ventana, un lugar
con luz, ventilación y temperatura constante en cada estación.
Mostró
el primer prototipo a sus amigos y vecinos e inmediatamente surgieron
mejoras; constituidos en un equipo de trabajo se preguntaron como podían
difundir y mejorar la idea para que más personas en la ciudad
disfrutaran de alimentos frescos todo el año…
Y nació el proyecto Window Farming, una red de ciudadanos que colaborativa y abiertamente innovan para construir ciudades más sostenibles y una mejor calidad de vida para sus ciudadanos. Más que la voluntad de crear el producto perfecto, el objetivo principal era involucrar a los participantes en el proceso creativo y hacerles sentirse parte activa en le creación de un mundo más sostenible.
El
proyecto cuenta hoy en día con más de 20,000 ciudadanos que
intercambian en la red experiencias, diseños, y proponen mejoras para el
mayor disfrute de toda la comunidad de “agricultores de ventana”.
Empezar tu “huerto de ventana”
Si queres empezar tu propio “huerto de ventana”, desde la web de Window Farming podes descargar gratuitamente el libro con las instrucciones de montaje, uso e iniciación elaborado con el conocimiento de todos.
Si
no sabes o no te interesa crear tu propio huerto, podes adquirir por
Internet el modelo que comercializa Windor Farming, un compendio de las
ideas y diseños más universales que han surgido en la comunidad. La
producción comenzó hace poco más de un año y se ha puesto en marcha a
partir de donaciones y microinversiones de particulares.
El
vídeo (en inglés, que esta abajo del post) nos cuenta el proyecto y los
beneficios que ha traído a todos los que lo han compartido. Para Britta
la mejor recompensa es la alegría de la colaboración “ver como alguien toma tu idea, la hace mejor, la comparte y reconoce tu contribución.”
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